LOS CHAVALES DE REAL MADRID ILUSIONAN

16 de septiembre de 2021 20:58

Por: Madridismo Aldia

por Sergio Martinez

Está siendo un buen comienzo de temporada para los de Ancelotti y gran culpa de ello la tienen los jóvenes de la plantilla. El italiano está contando con ellos y éstos le están devolviendo la confianza con grandes actuaciones. 

El Madrid cuenta con juventud en todas las posiciones. En defensa, Éder Militao lleva desde la temporada pasada demostrando que puede ser central titular del Madrid para muchos años. El brasileño, de 23 años, es poderosísimo al cruce, y recuerda en ciertas acciones a Pepe por esa velocidad. Evidentemente comete errores, pero los suele arreglar bien precisamente por su rapidez. Actualmente no hay ninguna duda de que es uno de los mejores centrales jóvenes de Europa, y parece que los 50 “kilos” que pagó el Madrid por él empiezan a justificarse.

En el lateral izquierdo, Miguel Gutiérrez (20 años) es la gran apuesta del Real Madrid, y el principal motivo por el que se vendió a Reguilón. Miguel debutó con Zidane la temporada pasada, y desde el primer momento se notó que este chaval tiene algo especial. Juega con el primer equipo como si estuviese con los juveniles, y no se corta ni con un cristal. Es un jugador descarado (en el buen sentido de la palabra) y atesora una calidad y un pie izquierdo exquisitos. Será el lateral izquierdo titular mas pronto que tarde.

En la medular, Fede Valverde y Camavinga ilusionan al madridismo a la vez que lo tranquilizan. Todos nos hacemos la pregunta “¿Qué pasará cuando no estén Modric y Kroos?” y lo primero que pensamos es en que vendrán años duros. Pues bueno, tranquilidad. Fede y Camavinga son dos jugadores diferentes a Kroos y Modric, pero sobradamente preparados para ir cogiendo su relevo a la vez que van aprendiendo de los dos genios. En este fútbol moderno en el que la capacidad física es cada vez más importante y en el que romper líneas cada vez se antoja más complicado, tener al uruguayo, de 23 años, y al francés, de solo 18, es un lujo del que no todos los equipos pueden disfrutar. 

Valverde lleva 3 temporadas a un gran nivel, con altibajos, pero demostrando que será un pilar fundamental del equipo, además del futuro capitán. Por otro lado, Camavinga ha caído de pie en el Madrid. En dos ratitos ha dejado un gol y una asistencia, pero sobre todo, la sensación de que no es normal jugar con esa sangre fría y esa seguridad cuando eres un adolescente recién llegado al mejor club de la historia. 

Y para acabar, los “brasiniños”. Vinicius y Rodrygo son dos diamantes por pulir. El primero está empezando a brillar en la que es ya su cuarta temporada en el Madrid. Sus tres temporadas anteriores no han sido buenas, dejando muchas dudas sobre la toma de decisiones y la definición. A muchos nos dejó fríos. Pero es que es muy joven, y con los jóvenes hay que tener paciencia, aunque eso es algo que los madridistas llevamos un poco mal. El arranque de temporada de Vini es una barbaridad, sobre todo porque parece otro jugador distinto. Sus dos debilidades parecen haber desaparecido. Toma buenas decisiones, elige bien al pasar el balón, elige bien a la hora de encarar o de dar pausa al juego, y, sobre todo, está definiendo como los ángeles de cara a portería. Si todo esto no es un espejismo, y de verdad Vinicius sigue a este nivel y lo mejora con los años, estaríamos ante un top 5 mundial, no existen jugadores de este corte.

Rodrygo es distinto a Vini, y es un error compararlos. Rodrygo ha tenido que adaptarse a una posición que no es la suya, la de extremo derecho, y a pesar de ello, su rendimiento es bueno. Es un jugador mas sobrio que Vinicius, con mejor toque de balón y mejor disparo, pero con algo menos de desborde. Lo que tiene este chaval es gol, y eso es innegable. Actuando desde banda derecha, desde izquierda, o como segundo punta, este chico tiene olfato goleador, además del don de la oportunidad. Si el Madrid hace bien las cosas con estos dos chicos, mucho cuidado con la pareja de extremos.

El futuro parece estar en buenas manos, los jóvenes de la plantilla, tenemos derecho a ilusionarnos.

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